Propóleo: Un potencial tratamiento para el COVID-19

La pandemia causada por SARS-CoV-2 y la enfermedad que produce denominada COVID-19, hace necesaria la precoz búsqueda de opciones terapéuticas. El propóleo se considera un potencial tratamiento debido principalmente a un efecto inhibidor de PAK1, generando así un efecto inmunomodulador y antiinflamatorio. Existe un potencial efecto antiviral de algunos principios activos abundantes del propóleo, ya evidenciado en otros coronavirus. Datos recientes indican una potencial interacción inhibitoria de la principal proteasa de SARS-CoV-2 con el fenetil éster del ácido cafeico (CAPE) presente en el propóleo, sustentado un potencial efecto antiviral para tratamiento del COVID-19. La quercetina también se ha postulado, por varios mecanismos posibles de acción y un efecto inhibidor comprobado sobre SARS-CoV-1. Varios compuestos del propóleo tienen potencial efecto de bloqueo de la enzima convertidora de antigiotensina II, principal receptor de SARS-CoV-2. El propóleo se ha administrado en ensayos clínicos aleatorizados en otras patologías sin reportarse efectos adversos. No se reportaron interacciones negativas con el tratamiento convencional de la diabetes tipo 2 y la enfermedad renal crónica en ensayos clínicos aleatorizados. Por tales motivos, en el presente artículo se hará una revisión de las consideraciones fisiopatológicas para la utilización del propóleo en el tratamiento de las distintas fases COVID-19, su potencial beneficio en asociación con la vitamina D y C, y además se planteara una forma de su administración.